07 de Febrero de 2020
En Humanmind la Lic en PsicologÃa, especialista en trastornos de ansiedad y psicóloga laboral, nos cuenta cómo se vive la ansiedad en estas épocas.
No hace falta detallar cual es el contexto en el que estamos viviendo mundialmente. Todos coincidimos en que el mismo, superó nuestra imaginación y seguramente en muchos momentos pensamos estar en un sueño.
Ansiosos, angustiados, con miedo, con incertidumbre son emociones que en estos tiempos son totalmente acordes a la situación actual. Y son muchos los factores que colaboran para ello.
Hoy quiero empezar a NO negar la situación, a NO negar que sentirnos asà es esperable. Nos llenan de información, tips y actividades para sentirnos bien (no estoy en contra de ello), pero tenemos que partir aceptando la realidad. SI, me voy a sentir más ansioso de lo normal, voy a tener millones de preguntas sin responder; voy a tener muchos datos, cuentas y números que no voy a poder controlar ni predecir como en otros meses. Y esto es solo un factor que colabora a aumentar nuestra ansiedad; si a ello le sumamos el encierro, la transformación de la rutina, de los horarios, el dejar de trabajar en muchos casos, el pasar a hacer plenamente actividades domésticas, los que tenemos hijos, la paciencia y tolerancia para contenerlos, divertirlos, la incertidumbre para muchos de cómo asumir los gastos y cuentas a fin de mes.
Es una gran batalla y desafÃo no sentir ansiedad contra todos esos factores, no les parece?.
Por eso, creo, es menester, empezar por aceptar que estamos viviendo algo fuera de nuestros planes, que es una excepción, y en el que va a haber muchos momentos en los que va a ser válido sentirse ansiosos, con miedo, angustiados, irritables, molestos y la lista puede seguir.
Aceptando ello, tarea no menor en estos tiempos, ahora si podemos preguntarnos, que podemos hacer para que ésta cuarentena no nos sea tan cuesta arriba?, porque tantas veces deseamos tener todo este tiempo estando en nuestras casas y en muchos momentos no sabemos qué hacer?, como podemos optimizar éste tiempo, reinventarnos, conectarnos con otras cosas y como ello nos puede generar bienestar y satisfacción también?.
Para no contribuir a aumentar más nuestros niveles de ansiedad, la sugerencia es intentar dentro de lo que se puede, mantener una rutina; el saber de antemano que nos depara el dÃa nos tranquiliza, nos ordena, nos programa. Claro está, que dejarnos un margen de tiempo para improvisar, para ser creativos con el tiempo, es parte de lo que más arriba mencioné: que deseamos tanto hacer cuando no podÃamos?. Desde ver aquella pelÃcula que nunca tuve la oportunidad de ver, hasta dedicarle la calidad de tiempo a mis hijos que antes el trabajo tal vez no me permitió; existen infinidades de deseos asà como infinidades de personasâ¦.
Podemos quedarnos solo en la rutina, en contar los dÃas que faltan y/o podemos ir más allá, ganarle en otros aspectos a todo este tiempo, para algunos totalmente perdidos, para otros muy valiosos y para muchos otros teniendo el desafÃo de transitarlo.
Cuando hablo de rutina, creo que todos entendemos a lo que me refiero, por eso, prefiero detenerme en ese margen de tiempo que nos queda; para algunos ese margen son muchas horas al dÃa, para otros, como en mi caso, solo dispongo de tres horas al dÃa (que es cuando mi hija duerme la siesta), horas muy valiosas por cierto. Este tiempo no planificado, no controlado, creo es muy buena oportunidad para invitarnos a pensar que nos gusta hacer fuera de las obligaciones, que nos da placer, que nos interesa más allá del trabajo, y cuando digo que es una oportunidad, lo digo, porque éste tiempo a todos nos va a llegar en algún momento de la vida, cuando nuestras carreras finalicen, cuando nos jubilemos, claro que esperemos que sea en otro contexto y no en una pandemia. Hoy tengo la oportunidad de observar en los tratamientos psicoterapéuticos con pacientes adultos mayores como una de las principales problemáticas es el no saber qué hacer con el tiempo a cierta edad, muchos de ellos ni se imaginaron que un dÃa llegarÃa el fin de la actividad laboral, muchos otros solo se dedicaron exclusivamente al trabajo, sin darse la oportunidad ni siquiera de cuestionarse que otras actividades, hobbies, interés podrÃan llegar a despertar su interés; Por lo que la invitación en todo éste escenario negativo y de pelÃcula, es tal vez, poder conectarnos con aquello que nos motiva, que nos interesa, por fuera de lo cotidiano y laboral y empezar dese ya a dedicarle el tiempo que merece; ya te pusiste a pensar?